ENTREVISTA
26 de octubre de 2016
Entrevistador: Agustín Chaves
El desarrollo científico en
Argentina
Sandra Torrusio es bióloga y trabaja en la Comisión Internacional
de Actividades Espaciales
AC: -¿Por qué elegiste
esta carrera?
ST: - En realidad creo que,
como a muchos chicos les pasa, ya desde chica me gustaba todo lo que tenga que
ver con la naturaleza. Desde ese momento ya supe que me iba a inclinar por las Ciencias Biológicas.
Lo que resultó diferente es el área de trabajo
a la que actualmente me dedico y a la que me dediqué prácticamente desde que me
recibí que son las imágenes satelitales.
AC: -¿Cómo llegaste a
relacionarte con el estudio de las ciencias
espaciales?
ST: - Por casualidad, a mí
particularmente me gustaba mucho lo que tenía que ver con el agua y las
comunidades de plantas que viven en ella. Cuando uno se recibe, a veces entre
lo que te gusta y las oportunidades que se van dando, hay distancia, y en
aquella época, año 1988, no había Internet ni celular. En las facultades había
carteles en los lugares donde la mayoría de los alumnos pasaban, y un día veo
uno que decía “Se busca biólogo para sensores remotos”. No tenía ni idea qué significaba, pero pensé
que era una oportunidad y presenté mi currículum.
En la entrevista, me dijeron que lo de los sensores remotos se trata de una aplicación
de imágenes satelitales a todo lo que
tiene que ver con el medio ambiente, me
gustó y en vez de mirar por un microscopio en un campo , empecé a ver todo
desde mas arriba.
Después fui
creciendo profesionalmente y tuve la suerte de entrar a trabajar en la Comisión Internacional
de Actividades Espaciales donde desarrollo actividades desde hace ocho años y donde
adquiero cada día más experiencia.
“Cuando un país tiene la
capacidad de desarrollar tecnológicamente satélites, va ganando un poco mas de
soberanía”
AC: -¿Qué importancia
tiene el desarrollo de satélites para nuestro país?
ST: -En general hoy, a
diferencia de cuando empecé con este tema espacial, hay muchísimos satélites
dando vueltas. Son varios los países que
tienen satélites propios mirando hacia la Tierra para monitorear el ambiente, las aguas, la
forestación y la agricultura. En general esos datos están disponibles, ya que hay
bastante acceso libre a los mismos.
Cuando un país
tiene la capacidad de desarrollar tecnológicamente satélites, de vincularse de
igual a igual con otros países que también lo están haciendo, va ganando un
poco mas de soberanía, mas independencia, y sobre todo un desarrollo
tecnológico y científico que no sólo sirve para los satélites.
Yo, desde el punto
de vista de la biología, trabajo en las aplicaciones de los satélites, pero hay
un equipo de gente que trabaja construyéndolos, fabricando los instrumentos,
tratando de manejarlos y desarrollando software. Por eso se necesitan, entre
otros, ingenieros, matemáticos, físicos y astrónomos para desarrollar
tecnología. Y hay
empresas mixtas, estatales y privadas, en las que todo ese desarrollo es
utilizado en Argentina, por ejemplo, para poner en marcha radares tales como los que se usan en los
aeropuertos, en vez de tener que comprarlos afuera e importarlos. Ahora se están
construyendo radares para uso meteorológico que tuvieron su origen en
instrumentos satelitales. Entonces, hay como un “plus”, un bonus a lo que se
hace desarrollando tecnológicamente satélites que se extiende a muchas otras áreas
a nivel ciencia, técnica y desarrollo que el país necesita. Por eso es
importante que nuestro país o que países de la región puedan desarrollar su
propia tecnología espacial.
AC: -¿Cuál es el proyecto
en el que actualmente estás trabajando?
ST: -En mi trabajo
puntual yo tengo como dos áreas fuertes: una es la de las aplicaciones de estas
imágenes satélitales. Existen diferentes
sensores y productos que se pueden aplicar y muchos usuarios que están necesitando
esos datos, entonces, una parte de mi trabajo, es vincularme con esos usuarios que
trabajan en la agricultura, que están relacionados con temas de la deforestación,
calidad de agua, ministerios, provincias, instituciones nacionales y universidades.
Otra área de trabajo es la de un proyecto
satelital, parecido al SAC-D desarrollado junto a NASA en el año 2011,
denominado “SABIA-Mar”; su lanzamiento está previsto para el 2020 y va a tener como objetivo principal la observación
del color del mar , la biodiversidad, el cambio climático, la protección de
costas, la exploración pesquera, la explotación de gas, petróleo y minerales.
Estos satélites pasan
por diferentes etapas de diseño y luego entran en la etapa de construcción
definitiva. Ahora estamos en plena etapa de evaluación casi a punto de empezar
a construir el satélite “SABIA-Mar”.
AC: -¿Cómo considerás que
se encuentra nuestro país a nivel científico en relación con otros países?
ST: -Yo creo que tiene un
puesto bastante elevado, sobre todo a nivel regional.
Si bien hay varios países que tienen satélites
y agencias espaciales, no todos tienen la capacidad de construirlos. Esto es lo
que pasa en el resto de Latinoamérica exceptuando Brasil que trabaja asociado
con China, y ha construido sus propios satélites.
Argentina tiene hoy la capacidad de construir
no sólo satélites e instrumentos, sino también cohetes, llamados Vectores, que
sirven para lanzar pequeños satélites al espacio.
Para poner en órbita
grandes satélites se necesitan cohetes muy grandes, que en nuestro país aún no
se construyen, como fue el caso del AR-SAT para comunicaciones. Los satélites
de observación de la Tierra
están a 700 km ,
los de telecomunicaciones están a 36.000 km y los que usan el GPS están a 25.000 km de la Tierra.
Sandra Torrucio es un ejemplo de trabajo, esfuerzo y compromiso con el futuro del país.
¡Excelente, Agus!¡Muy interesante todo lo que aprendimos de esta profesión y del futuro del país en términos tecnológicos y satelitales!
ResponderBorrar